viernes, 17 de agosto de 2018

Tomé clases de baile y...



“Mi nombre es María Cristina, te cuento mi historia: Mi hija se casaba y yo siempre tuve como asignatura pendiente tomar clases de baile. Quería poder moverme al ritmo de la música en la fiesta de casamiento de una manera moderna y canchera. Te juro que pensé: soy demasiado grande para tomar clases, seguro mis compañeros de baile van a ser todos jóvenes! Bueno, tomé el impulso y ¡me anoté! Hice 10 clases y había otras chicas de +50 como yo, vencí mis miedos y el día del casamiento me bailé todo”.

María Cristina L., Boedo, CABA

#viejapara
#bellezachronos

¿Vieja, Yo?


Hola, holaaaa!!! 
Natura Chronos nos invita a sumarnos a la onda de su comercial que cuestiona preconceptos y prejuicios: https://youtu.be/e0mEIDdbOnU

¿Quién define que sos vieja para ser vos misma?

Natura Chronos nos invita a que contemos una anécdota, en un máximo de 10 líneas de texto, contando qué decisiones te animaste a tomar y por qué sentías que no tenías edad para hacerlo.

Y que acompañemos una foto.

La ganadora será la que obtenga mayor cantidad de "Me gusta" para su historia.

Apúrense a mandar la historia y la foto (el concurso cierra el próximo lunes 20.)  
Natura Chronos ya está armando los premios.

jueves, 16 de agosto de 2018

¿Viejas? NO.


Con mi amiga Raquel -entrerriana como yo- hemos superado la etapa de cuidar nietos que fue muy feliz.

Ahora volvimos a las cosas que hacíamos en la clase de manualidades de la escuela: pasamos unas tardes muy divertidas entre animales de crochet y muñecas de tela. 

A las dos nos gustan las plantas y la naturaleza nos responde con colores y perfumes que alegran la casa. Así disfrutamos las cosas sencillas de la vida.

Irma A., General Rodríguez, pcia. de Bs. As.

Nunca es tarde para estudiar... francés.




Soy Estela tengo 50 años y “amo viajar”
Con mi marido nos propusimos ahorrar para conocer Francia: con mucho entusiasmo busqué en internet lugares más importantes, museos, cafés, etc. 

La curiosidad por todo crecía cada vez más y me pregunté ¿Por qué no aprender el idioma? Muchos me dijeron: “¿A esta edad? Ya estás vieja para aprender”.
Pero cuando me propongo algo... Tomé impulso y acá estoy estudiando francés hace casi un año.

Felizmente puedo decir: ¡Nunca es tarde para aprender un idioma!

Estela G., Hurlingham, pcia. de Buenos Aires.

#viejapara
#bellezachronos

miércoles, 15 de agosto de 2018

¡HAGO AEROBOX Y LA PASO GENIAL!



Para algunos, 43 años no es nada; pero luego de un largo tratamiento el médico me dijo que, por la medicación y la edad, tenía que realizar actividad física y me recomendó caminata. 
Como me parecía poco y me gustan los desafíos....hoy hago aerobox y lo paso genial !!!

(Como no tengo foto, les mando ésta de mis vacaciones de invierno).

Gracias por leer mi historia; y no dejen de enviar la de ustedes a:

moya.ana@gmail.com

¡¡¡Quiero muchos "likes" chicas!!!

#viejapara
#beautychronos

María S., General Rodríguez, pcia.de Bs. As.

martes, 14 de agosto de 2018

Mirta y su pandilla


Somos un grupo de 24 mujeres egresadas del Comercial de Villa Ballester en 1972. En estos 46 años hemos compartido momentos inolvidables.  Hasta hoy, nunca dejamos de vernos. En 2007 hicimos juntas un viaje a fines de septiembre: fue un bello regalo que nos hizo la vida.

En 2014 hicimos el viaje de “Regresadas a Bariloche”. Muchos se rieron, y nos dijeron que estábamos viejas para esos trotes. Nos fuimos igual; partimos diecisiete “regresaditas”,  algunas no  habían podido ir a los 17 y lo hicieron a los sesenta, otras repetimos la experiencia.
Pasamos una semana maravillosa, compartimos días de alegría y emociones fuertes. Hasta nos hicieron un reportaje en El Cordillerano y una nota en la tele del lugar.
Continuamos viajando una vez al año y viviendo con la mejor energía esta amistad profunda que nos  une. Cada encuentro es mágico, de pronto somos esas adolescentes bulliciosas que se conocieron hace cincuenta años y lo seguimos celebrando.

Nunca seremos viejas porque nuestra niña interior es inquieta y se llena de energía con cada encuentro.

Mirta P., Carapachay, Pcia. De Bs. As.

Alicia en el país del ajedrez

Alicia toma clases de ajedrez.
"Esta soy yo: Cuando tenía unos 9 años, mi mamá (que era muy inteligente) nos mandó a aprender ajedrez con un vecino, que era cero docente y nos aburrió en un par de días. Me quedé con la espina, y yo misma me dije hace un año:
-¿Estás vieja para aprender?  
Nunca respondo sí a esa pregunta, y en cuanto vi clases de ajedrez, donde habitualmente hago gimnasia, me zambullí en la “pileta” del juego. Ya logré hasta una modesta medalla, Y me divierto con chicos y jóvenes tratando de lograr el jaque mate. Eso sí, ¡me suben las pulsaciones cuando pierdo!" 
(Alicia, E. Avellaneda, Pcia. de Bs.As.)

#viejapara
#bellezachronos

lunes, 13 de agosto de 2018

¿Te dijeron que ESTÁS VIEJA PARA...?


Hola, holaaaa!!! 
Natura Chronos nos invita a sumarnos a la onda de su comercial que cuestiona preconceptos y prejuicios: https://youtu.be/e0mEIDdbOnU

¿Quién define que sos vieja para ser vos misma?

Natura Chronos nos invita a que contemos una anécdota, en un máximo de 10 líneas de texto, contando qué decisiones te animaste a tomar y por qué sentías que no tenías edad para hacerlo.

Y que acompañemos una foto.

La ganadora será la que obtenga mayor cantidad de "Me gusta" para su historia.

Apúrense a mandar la historia y la foto (el concurso cierra el próximo lunes 20.)  
Natura Chronos ya está armando los premios.

Aquí les dejo unos ejemplos personales:

Me dijeron Vieja para...
Esta soy yo, sin photoshop: me dijeron que estaba vieja para hacerme reflejos “ultravioleta” (el color de tendencia  2018)... Igual fui a la peluquería y me di el gusto.


Cuando tenía 40 años me invitaron a esquiar; las compañeras de viaje, más jóvenes, habían tomado clases de gimnasia pre-esquí y preguntaban: 
“-¿Cuántas semanas de esquí tenés? 
-Yo: [-...] 
-Ellas: -Ah...” 
Fui, tomé las clases y al año siguiente participé en una carrera para principiantes ¡Y llegué sin caerme!

Esta señora se llama Elsa Cia: así esquiaba a los 90 años:



A mí también me dijeron que estoy vieja para tener un amante, para cruzar la cordillera de Los Andes y para hacerme este avatar...

¿Ustedes qué tienen para contar?
Y no se olviden de agregar:
#viejapara
#bellezachronos


sábado, 11 de agosto de 2018

Si vas a NY❤️...

Si te interesa la moda (más allá de las compras) te invito a visitar el Museo del Fashion Institute of Technology (FIT Museum); está en la Séptima avenida y la calle 27. Hay una muestra “Pink”, alusiva al rosa: la historia de un color que los americanos aman, organizada por la directora y curadora principal del museo, la Dra. Valerie Steele.

Vestido de Céline, colección Primavera 2017. Donación de Céline 2017.19.1

La podrás ver en la Galería de exposiciones especiales, desde el 7 de septiembre de 2018 hasta el 5 de enero de 2019.

Vestido, del siglo XVIII, compra de museo. 2017.46.1

Hay unos 80 conjuntos del siglo XVIII hasta hoy, con etiquetas de diseñadores y marcas como Elsa Schiaparelli, Christian Dior, Yves Saint Laurent, Alessandro Michele de Gucci, Jeremy Scott de Moschino y Rei Kawakubo de Comme des Garçons.

Comme des Garçons, conjunto, otoño de 2016, Colección "Punk del siglo XVIII", otoño / invierno de 2016, Japón, compra del museo. 2017.52.1
Los vestidos demuestran cómo diferentes tonos de rosa entraron y salieron de la moda, evocando diferentes ideas sobre la feminidad. Alrededor de 1900, por ejemplo, los rosas pálidos implicaban una feminidad delicada y aristocrática, mientras que en 1912 un color cereza brillante indicaba una imagen más exótica. En la década de 1920, famosa por el Little Black Dress, creció la popularidad de una gama de rosas, coronada por el llamado Shocking Pink de Schiaparelli de finales de la década de 1930.

Charles James, vestido, 1937, USA, donación de Mrs. John Hammond. 77.89.3
La exposición estará acompañada de un libro publicado por Thames & Hudson -208 páginas, 120 ilustraciones en color, en tapa dura: 120 dólares- y un simposio gratuito el 19 de octubre de 2018, que será transmitido en vivo.

Museo del Fashion Institute of Technology (FIT Museum)
Séptima avenida y calle 27
Ciudad de Nueva York 10001-5992

HORARIOS:
Martes - Viernes: mediodía - 8 p.m.
Sábados: de 10:00 a 17:00
Domingo - Lunes: Cerrado
Vacaciones legales: cerrado



     

miércoles, 1 de agosto de 2018

La historia de Gerda Taro, para la tapa del Blog



El 1 de agosto de 1910 naciò en Stuttgart, Alemania Gerda Taro, la primera fotoperiodista en cubrir y en morir al informar de una guerra.

Apodada "Pequeño zorro rojo" por su juventud, astucia y color de pelo, es la alma mater del seudónimo Robert Capa como firma de las fotografías que le dieron fama profesional en su corta vida.Tardó encontrar su vocación, pero hasta en eso fue revolucionaria al ser la primera fotoperiodista reconocida como tal al decidir empuñar una cámara en lugar de ser musa de un fotógrafo. También fue pionera en cubrir un frente de guerra y, por desgracia, también la primera en encontrar la muerte en ella, en la Guerra Civil Española en 1937.


Solo 26 años vivió Gerda Taro, pero estuvieron llenos de intensidad, aventuras, viajes, amor, creatividad y, sobre todo, de un legado en fotografías que sirven para documentar el sufrimiento de una guerra en la que siempre pierde el pueblo, indefenso y roto por el dolor.

En 1929, Gerda Taro y su familia se trasladaron a Leipzig, justo antes del comienzo de la era nazi en Alemania. La joven Gerda apoyó a los izquierdistas en lugar de a los nazis y por ese motivo estuvo sometida a custodia protectora, aunque el mayor susto fue en 1933, cuando la detuvieron por hacer campaña contra el gobierno nazi. Toda su familia se vio obligada a buscar residencia en otros países y acabaron separándose en distintos destinos.

Ella escapó con una amiga a París, donde trabajó de niñera, de camarera, de mecanógrafa de un psicoanalista y de secretaria en la agencia Alliance Photo. En este último trabajo no solo consiguió una buena agenda de contactos, sino descubrir su vocación, algo que el destino se encargó de afianzar al conocer a su alma gemela, un judío de origen húngaro llamado André Ernő Friedman que intentaba ganarse la vida como fotógrafo. Gerda y André se enamoraron, se hicieron novios y André le enseñó a Gerda sus conocimientos de fotografía.

Sin embargo, la falta de trabajo y a la vez la necesidad de generar ingresos, hizo que Gerda ideara una curiosa estrategia: inventaron un personaje llamado Robert Capa con el perfil de ser un afamado fotógrafo llegado de Estados Unidos para trabajar en Europa. Al ser tan famoso, decidieron que vendería sus fotos a través de sus representantes, que serían ellos: Friedman y Pohorylle, pero al triple del precio que un fotógrafo francés. El plan funcionó tan bien que al poco tiempo recibieron gran cantidad de encargos y por fin empezaron a ganar dinero.

Para hacer la historia más verosímil, ella escogió Gerda Taro como seudónimo por su ortografía básica, fácil de pronunciar y su sonoridad parecida a la de Greta Garbo. Para André inventó el nombre de Robert Capa, la auténtica fuente de negocio que en realidad marcó un estilo de fotografías realizadas por ambos y muchas veces resultado difícil adivinar el autor.

En ese momento de sus vidas y de su carrera profesional, España, con el inicio de la Guerra Civil en 1936, era el lugar ideal para forjarse una buena reputación en prensa e incluso hacer fortuna. Decidieron viajar a Madrid, pero además de por los motivos profesionales, también movidos por la injusticia social y sus ideales revolucionarios, y por eso el bando republicano resultó ser el mejor de los destinos.


MÁS INFORMACIÓN
Robert Capa, en realidad Gerda y André, viajó por los frentes republicanos españoles -tanto juntos como por separado-. Cubrieron el frente de Barcelona, de Aragón y el de Madrid. Y también viajaron a Córdoba, donde Endre tomó una de sus fotos más famosas, simbólicas y, a la vez, polémicas: ‘Muerte de un miliciano’, ya que muchos dicen que no fue espontánea, sino planificada; mientras que otros creen que fue Gerda y no Endre la autora de la fotografía.

Ambos fueron testigos de diferentes episodios de la guerra y realizaron reportajes que luego eran reproducidos en publicaciones como ‘Regards’, ‘Vu’ o ‘Ce Soir’. A finales de 1936 iniciaron un trabajo en el que André grabó con una cámara mientras ella tomaba las fotografías. Trabajaron tan estrechamente que muchos de los fotogramas de la película son muy similares a las imágenes tomadas por la fotógrafa.

En 1937 se produjo cierto distanciamiento entre ellos y André Friedman se quedó con el nombre de Robert Capa. Gerda Taro rechazó la propuesta de matrimonio de André y desde ese momento continuaron sus carreras de forma independiente. Ella se acercó a los intelectuales antifascistas europeos, como George Orwell y Ernest Hemingway, y empezó a comercializar su trabajo bajo la etiqueta de Photo Taro a publicaciones como ‘Illustrated London News’, ‘Life’ y ‘Volks Illustrierte’. Él, por su parte, acabaría fundando la agencia Magnum Photo.

‘La maleta mexicana’ (tres cajas con casi 4.000 negativos de fotografías de la Guerra Civil Española realizados por Robert Capa, Gerda Taro y David Seymour), hizo justicia en 2008 al revelar que muchas de las fotografías firmadas como Robert Capa eran en realidad de Taro.

Muriò el 26 de julio de 1937, en plena Guerra Civil, en El Escorial, España
Està sepultada en el cementerio de  Père-Lachaise, por si se dan una vuelta cuando pasen por Parìs. Pueden tomar como referencia el monumento al general armenio Antranik, sobre su blanco caballo de batalla, y van a llegar a la tumba de Gerda Taro, junto a la del médico Domanska (Dr.Dubois, muerto en la batalla de Brunete) voluntario en España republicana.

Fuente:
https://elpais.com/cultura/2018/08/01/actualidad/1533104842_385500.html

Cher anticipa el verano y viene con màs...



“El cliente es muy exigente en términos de la calidad, del precio; y eso se ve en los resultados. Seguimos trabajando con esta “mujer net” que siempre estuvo en CHER. Usamos telas que mandamos a fabricar con nuestros diseños: linos, algodón con elastano, crepes para monos y sastrería... todo con una vuelta morfológica que nos identifica” dice una Marìa Cher, que es en sì misma imagen de su marca.



El color opera como argumento creativo, bien manejado sobre texturas diferentes, con siluetas simples y funcionales. El blanco, el negro, el verde militar, los manteca, los arena, los visones ...
La mujer net ama las sedas, los pantalones, las camisas, las túnicas, las parkas.



La mujer net puede levantar su onda clásica poniéndose una camisa de voile, de poplín y un pantalón más moderno, en una tela “paper” (no se arruga y seca rápido). Cuando elige un color no mezcla y se siente cómoda con un equipo de viscosa, que tiene una caída agradable, tacto confortable y precio más razonable que la seda.
El diseño y el color, tanto en tejido plano como en punto y en algodón con seda, algodón flamé y algodón pima, apuntan a darle aire al estilismo habitual.


Para una chica más “arty” que se divierte al mezclar hay tonos más subidos y estampas propias realizadas sobre la prenda terminada. Y el rock no puede faltar a la cita de esta etiqueta que lo lleva en su ADN: los paillettes resignificados  en tachas bicolores, holográficas; en cueros metalizados, en tejidos con lurex y  denim oversized.


Y los accesorios, un acierto: carteras funcionales, de medidas razonables y zapatos, sandalias o botas confortables (bien armadas pero sin estructura rìgida; ergo, no duelen).


Las zapatillas son otro ìtem con mucha onda (pero no te pondrè la foto para que averigûes por tu cuenta).

Cher Beauty o la democratización de la belleza.



Con la convicción de que no hay edad para el carácter, la elegancia y la provocación Cher Beauty llega como una extensión de valor de la marca, a formar parte de un nuevo segmento “Upper Masstige”. Es la combinacionaciòn de una marca aspiracional como es Cher  un precio al público que se ubica entre “masstige” (marcas masivas) y “presstige” (marcas de lujo).



Historia de Miércoles:Emilia Pardo Bazán, el amor gallego de Benito Pérez Galdós

“Ven a tomar posesión de estos aposentos escultóricos. Aquí está una buitra esperando por su pájaro bobo, por su mochuelo”. “Te beso un mill...